lunes, 5 de septiembre de 2016

SALÓN PARA LA ORACIÓN POR LAS BUENAS COSECHAS (TEMPLO DEL CIELO - PEKÍN - CHINA)





Una fría tarde de otoño el emperador salía del templo después de haber agradecido las buenas cosechas de ese año, sería en la próxima primavera cuando habría de volver a rogar por las del próximo año.

Parecida podría haber sido la escena cuando el templo del cielo era utilizado por los chinos para rogar y dar las gracias por las buenas cosechas. Construido en su época por la dinastía Ming, hoy en día es una de las mayores atracciones de Pekín, rodeado por un frondoso parque, se cuentan por miles los turistas que lo visitan diariamente.

Nosotros nos dirigimos a él después de ver la Ciudad Prohibida, impresionados por la magnitud de la construcción, nos quedamos con ganas de más, un veloz taxista nos llevó unos 5 km por el caótico tráfico de la capital de China, hasta las puertas del parque, amenazaba lluvia así que raudos nos dirigimos a la entrada del templo.

 El recinto del templo congrega a varios edificios y construcciones de enorme belleza, y pese a lo que pueda parecer toda su ubicación está regida por la cosmología y la numerología, todas las formas y disposiciones tienen un porque dentro de la ciencia de la antigua China. Su disposición va de norte a sur, por lo que el visitante que entre por la entrada principal (nosotros lo hicimos por otra) puede ir encontrándose con todos ellos sin perdida.

 El que veis en la foto es uno de sus edificios más carismáticos el QinianDian, o para que nos entendamos, el salón para la oración por las buenas cosechas, un edificio circular de 30 metros de diámetro y 38 de alto, construido sin utilizar ni clavos ni vigas.

Un impresionante recinto al que hay que dedicar mucho más tiempo del que pudimos dedicarle nosotros, por lo que nos fuimos de ahí con el recinto solo explorado en una pequeña parte y con la sensación de que en próximas visitas a la imponente Pekín sería un sitio prioritario de nuestros planes. Algún día…


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